NOCHE PROHIBIDA 
  I 
Me entregué a ti sensual noche y a tu oculta viña, 
A tu profunda dicotomía cósmica. 
Como la que tiene el  albaricoque, 
En su semilla dura y rugosa. 
  II 
Anduve merodeando tus pechos de rosa, 
Tu contornada cintura mágica. 
Remonté tus caderas rojo carmesí, 
E hicimos el amor vestidos de estrellas. 
  III 
De tus racimos tomé la uva prohibida, 
Las que explota en la boca. 
Y derrama su jugosa esencia purpurea, 
Entre las comisuras de los labios. 
  IV 
Noche de perfumadas espesuras, 
De encantos delirantes y misteriosos. 
Después de este periplo fogoso del alma, 
Abrázame con tus velos y entrégame tu calma. 
  Bernal Vargas

 
 
2 comentarios:
Que hermoso poema! , con un contenido metafórico bien logrado , la noche como la mujer amada y llena de sensualidad y calma , bello poema poeta ,
Gracias eres muy acertado en el comentario, y siempre lo has sido.
Gracias amigo.
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