La tarde es gris
una pequeña taberna
nos oculta
un café sobre la mesa
y un poema
luego tus labios
los míos
un fuego encendido
el deseo flórese
en nuestras
miradas esquivas
discreto un roce
de mi boca
tú respondes
con dulzura
brota la pasión
que vibra en el pecho
al amparo
de nuestros deseos
y el amor
fluye suavemente
en nuestra conciencia
que impaciente espera
la magia
del primer beso.
Bernal Vargas
una pequeña taberna
nos oculta
un café sobre la mesa
y un poema
luego tus labios
los míos
un fuego encendido
el deseo flórese
en nuestras
miradas esquivas
discreto un roce
de mi boca
tú respondes
con dulzura
brota la pasión
que vibra en el pecho
al amparo
de nuestros deseos
y el amor
fluye suavemente
en nuestra conciencia
que impaciente espera
la magia
del primer beso.
Bernal Vargas